Dejé de escribir novelas policíacas el mismo día en que vi aquella criatura atravesar las paredes de mi oficina: como una aparición bíblica me ordenó plasmar en piedra una nueva doctrina del fin de los tiempos. Ahora bien, ¿Cómo podré explicarle a esa entidad que yo mismo soy su creador?
top of page
bottom of page
Comentários