Registro en Safe Creative: Código #17021723228.. 19-feb-2017
Flor que no marchitas, eres canción de mi cuerpo árbol
vete sin irte, cual la brisa de aquella música de ausencias.
Una vejez de lluvia con lágrimas prendadas al recuerdo
dejan tus senos al viento cuando levantas manos al adiós.
El olvido estaba en tus ojos, querÃa me vieras y solo mirabas,
de barros y cenizas quedó labrado el sentimiento ya perdido.
El cuerpo del alma lo encendà con toques de posibles, pero
la luz perdió el espacio y se quedó como un silbo de memoria.
El árbol ya no canta, no florece. Percibo tus olores y no estás,
sólo hojas desvalidas humedecen el cuerpo y no lo advierto.
Entro a un espacio en blanco y tus muslos ya no marcan el camino,
bendita tu ardiente mariposa, que aún florece en mi pensamiento.
